El primer filme de gran éxito de Netflix llamado Bird Box tiene una nueva entrega ahora ubicada en España donde pierde el encanto y carisma de Sandra Bullock, para darle un giro ingenioso pero muy mal ejecutado.
Bird Box Barcelona (2023)
Puntuación: ★★
Dirección: Àlex Pastor y David Pastor
Reparto: Mario Casas, Georgina Campbell, Diego Calva, Alejandra Howard, Lola Dueñas, Leonardo Sbaraglia y Patrick Criado
Disponible: Netflix
Como sabemos Netflix es una plataforma de películas y series donde todas las semanas suben un contenido de forma abrumadora que en ocasiones es difícil recordar cuando se estrena y más, el impacto que genera, y es por eso casi ya nadie se acuerda del revuelo que causó Bird Box en diciembre de 2018, siendo el primer éxito genuino de la plataforma, acumulando vistas récord (sigue siendo la cuarta película más vista en Netflix según los datos de ellos) y se convirtió en una de las primeras películas memes genuinas de esta época, incluso hay recordar el trastornado Bird Box Challenge. Pero como dijimos, Netflix crea fenómenos pasajeros, que con el paso de los años ya nadie se acuerda.
Es así como casi cinco años después volvemos a ese universo donde la gran mayoría ni nos acordábamos. A pesar de todas sus momentos virales, Bird Box fue un giro lamentable y descuidado de todo lo bueno que era A Quiet Place, ya que ambos filmes tratan casi igual sus temas, en el caso Bird Box, la cinta era menos efectiva a la de construir muy bien la mezcla de horror, fantasía y drama familiar todo eso llevado en un thriller de supervivencia.
Como dijimos hemos vuelto a ese universo en el filme llamado Bird Box: Barcelona. Una cinta que busca ser un intento de expandir el mundo del primero y atraer a la considerable audiencia de habla hispana de la plataforma, pero nuevamente ejerce una ambición más allá de sus posibilidades, careciendo de emociones y ahora con una trama mucho más hueca, si podemos utilizar dicha frase. Como uno podría haber adivinado, la acción se ha trasladado de California a Barcelona, reemplazando a Bullock con Mario Casas, la mayor estrella moderna del cine de España, donde interpreta a un hombre llamado Sebastián, que es asediado por las criaturas que ya conocemos que provoca que las personas se suiciden.
Cabe resaltar que el primer acto es lo bastante interesante y nos coloca a la figura de Sebastián, pasando de la mera supervivencia a algo mucho más inquietante, y aunque no siempre está bien elaborado y, a veces, se explica con torpeza, muestra que el dúo de guionistas y directores, Alex y David Pastor, están realmente interesados en intentarlo y hacer algo diferente con este spin-off, eso sí, los elementos vistos en la primera permanecen: Sebastián finalmente se encuentra con un grupo de extraños, incluida Georgina Campbell, como en el original, pero la dinámica es diferente, la película se enfoca más en algo que era menos integral en la primera, como algunos recibir a los visitantes como una bendición y no como una maldición.
Algo interesante que hace el filme es la forma en que intenta hablar sobre los peligros del fervor religioso y como el ser humano se refugia en la fe para no afrontar un trauma; como la pena y la pérdida, emociones que si no se le presta atención podrían aterrizar.
Hay algunas escenas muy bien logradas, como una que incluye un suicidio masivo en el metro, que sirve para mostrar el impacto de los eventos que ocurren, pero fuera de esos detalles y las ideas que busca plantear el filme, la cinta tiene un algo que no termina de funcionar, puede ser que en la primera teníamos a Bullock, que solo con su presencia y carisma logra darle un aporte extra a sus filmes; y en esta, Casas ha demostrado ser un actor todo terreno, pero aquí parece que está en piloto automático y no logra darle más fuerza ni emoción a su personaje.
Otro aspecto que resalta, es que la cinta vuelve a mostrar los mismos problemas que tenía la primera, pero incluso se notan más, como la forma en que se muestran a las criaturas, solo que aquí incluso se le da una connotación angelical que parecen provenir de una fe micro presupuestada. También sufre de la maldición de las secuelas, que sobre explicar algo que es mejor dejar sin explicar.
Al final, el filme es interesante por la forma en que nos regresa a un mundo que la mayoría de nosotros habíamos olvidado, y es mucho mejor de lo que podría haber sido, pero tampoco ofrece algo nuevo pese a tener ideas interesantes, que nunca desarrolla ni amplía.