La nueva versión de Chicas Pesadas carece de la emoción y el encanto de la exitosa película original, los chistes buenos son los de la original, y los intentos nuevos que agregan quedan a medio gas. Las canciones son correctas y están bien compuestas, pero son las del musical de Broadway, no hay originalidad ni chispa. Una cinta es agradable, pero no justifica su existencia.
Chicas Pesadas (2024)
Puntuación: ★★½
Dirección: Samantha Jayne y Arturo Perez Jr.
Reparto: Angourie Rice, Renee Rapp, Auli’i Cravalho, Jaquel Spivey, Avantika, Bebe Wood, Christopher Briney, Jenna Fischer, Busy Philipps y Tina Fey
Estreno en cines
Veinte años después del éxito de la película original, llega a cines una nueva Chicas Pesadas, una versión que nace del musical de Broadway nominado al Tony que se estrenó en 2017, una nueva obra llena de energía, pero sin la profundidad y el encanto que hicieron que la comedia de 2004 pasará a la historia del cine. En su debut cinematográfico, los directores Samantha Jayne y Arturo Pérez Jr. se mantienen fieles a la historia original, una joven e ingenua adolescente descubre que la secundaria es un laberinto de decisiones y hormonas incontrolables, solo que ahora los sentimientos serán expresados por canciones que vienen de la obra de teatro, hay un par de temas nuevos, pero mantienen las mismas líneas que los otros.
El estreno de dicha película por parte de Paramount es toda una curiosidad, ya que la cinta cuando se puso en marcha nunca se creó con la intención de llevarla a cines, su estreno era ir directamente a la plataforma de la marca, pero al final la empresa decidió que fuera a la pantalla grande, razón por la que su aspecto carece de brillo cinematográfico, y sus coreografías no son tan épicas como otros musicales que hemos visto en cines.
Como dijimos, la cinta sigue el mismo caminó de la obra de 2004. La inteligente y amable Cady (Angourie Rice) ha sido educada en casa por su madre zoóloga (Jenna Fischer), quien la crio en África, pero aceptó un trabajo en las afueras de Chicago, donde de repente Cady se ve sumergida en la ansiedad paralizante y el escrutinio de la escuela secundaria. Al hacerse amiga de los extraños Janis (Auli’i Cravalho) y Damian (Jaquel Spivey), atrae la atención de la chica más popular (y snob) de la escuela, Regina George (Renee Rapp) y sus igualmente tontas y bonitas amigas Gretchen (Bebe Wood) y Karen (Avantika). Regina toma a la ingenua Cady bajo su protección, decidida a cambiarla.
Las Chicas Pesadas originales (que se basó en el libro de consejos Queen Bees And Wannabes, y al igual que esta película y el musical, escrito por Tina Fey) trataba la escuela secundaria como un estudio zoológico, y Cady reconocía las similitudes entre las travesuras inmaduras de los adolescentes y los comportamientos depredadores de la fauna africana. Lohan en la original interpretó a Cady con tal alegría autocrítica (comunicando tanto la ingenuidad del personaje como su creciente deseo de alcanzar la misma posición social de élite que Regina) que la película ofreció delicias brillantes e icónicas junto con una lección sobre la importancia de mantenerse fiel a uno mismo.
Y digamos que ese mensaje permanece en esta nueva película, pero los matices de la historia se pasan por alto en favor de números de cantos y bailes. Algunas de las melodías intentan dar sombra a los personajes secundarios, revelando las inseguridades enterradas de Regina y las de sus amigas, pero, en general, los arreglos pop/rock no son memorables. Las felices excepciones incluyen ‘Stupid With Love’, cantada por Cady que se desmaya una vez que conoce al lindo Aaron (Christopher Briney), quien resulta ser el exnovio de Regina, y ‘I’d Rather Be Me’, una conmovedora canción que habla sobre la confianza en sí misma que interpreta la orgullosa marginada Janis (Auli’i Cravalho).
Angourie Rice hace un notable trabajo como Cady, su interpretación no posee la vulnerabilidad o el brillo que Lohan le dio a Cady y, como resultado, el viaje del personaje de una matemática nerd a una chica popular viciosa no tiene ese impacto emocional, y aquí no estamos hablando de comparación, sino más bien en esa esencia que debe transmitir el personaje protagonista.
Chicas Pesadas trata sobre cómo las adolescentes pueden ser mucho más horribles entre sí que cualquier chico, y cómo las mujeres pueden empoderarse unas a otras en lugar de derribar a sus compañeras. Pero para que esa historia funcione, el personaje de Cady necesita ser una chica simpática, y esta nueva película rara vez le brinda a Rice suficiente espacio para navegar en la creciente comprensión del personaje de ser una chica ingenua a una chica superficial y mezquina en la búsqueda de popularidad.
Rapp aporta un delicioso sarcasmo a su interpretación de Regina, y realmente rivaliza con McAdams, pero lo hecho por la nominada al Oscar ya es parte de la cultura pop e historia del cine, y esa Regina George es imbatible; además que las frases icónicas que tira el personaje son líneas de diálogos de la original, así que realmente no hay un aporte nuevo, y en su interpretación del icónico tema de ‘Meet the Plastics’, pues es de la obra de Broadway, y la interpretación en el teatro sigue siendo mucho mejor.
Estamos claros que está nueva Chicas Pesadas queda lejos de estar a la altura de la original, aunque cuya trama no ha cambiado apreciablemente, Fey (quien también retoma su papel de maestra) deja espacio para incorporar nuevos elementos a la narrativa como es el uso de las redes sociales y los teléfonos celulares, lo cual, son los únicos aportes nuevos, que eran detalles demasiados obvios que tenían que estar para que esto funcione.