Kneecap | Review

La grana apuesta de Irlanda a los Oscar 2025, es un filme que relata los orígenes casi anárquicos del subversivo grupo de hip hop en lengua irlandesa ‘Kneecap’, donde se interpretan a sí mismos.
Kneecap (2024)
Puntuación:★★★★
Dirección: Rich Peppiatt
Reparto: Naoise Ó Cairealláin, Liam ÓG Ó Hannaidh JJ Ó Dochartaigh, Michael Fassbender y Simone Kirby
Disponible: Google VOD  

Kneecap, dirigida por Rich Peppiatt, es de esas películas que son únicas, ya que tal vez no haya otra película como esta. Esta audaz y provocadora obra, que combina música, política y la lucha por la identidad cultural, narra la historia de los orígenes del grupo de hip hop en lengua irlandesa subversivo y obsceno del mismo nombre: Kneecap. Este grupo nació en las calles del Belfast contemporáneo.

Kneecap es una obra que pone a prueba los estereotipos de las películas de “formemos una banda” o “sigamos las normas básicas para contar los orígenes de un artista”. Aquí, todos esos aspectos están mezclados con un humor sucio, casi obsceno, lleno de drogas, chistes terroristas e incluso unas cuantas nalgas pintadas con la frase “Brits Out”. Todo esto sirve para adornar una historia cuyo trasfondo narra las luchas del pueblo irlandés contra la autoridad británica y su defensa del idioma gaélico, lo que refleja una profunda crítica social.

La película maneja un tono anárquico y rebelde, que se refleja en su estilo visual y narrativo. A través de un humor oscuro, momentos caóticos y una mezcla de música hip-hop en gaélico, Kneecap mantiene una energía frenética y cruda. Esta combinación de humor y seriedad le permite abordar temas políticos profundos sin perder esa identidad tan única que plantea.

Una diferencia significativa de Kneecap con otras películas de su estilo es que, interpretándose a sí mismos, los tres protagonistas ofrecen actuaciones lo suficientemente fuertes como para parecer profesionales, especialmente el miembro de la banda reticente JJ Ó Dochartaigh, quien interpreta a un profesor irlandés sustituto de modales suaves que se convierte en DJ maldiciente. Aunque la película no es 100 % real, es bastante cercana a la realidad.

Ambientada en un Belfast que marca su propia pauta, Kneecap no oculta la herencia republicana de sus protagonistas. Fassbender interpreta al padre terrorista del joven Naoise Ó Cairealláin. Es un veterano de las protestas sucias y de las campañas de atentados del IRA, un asesino de mirada dura que abandona a su hijo para pasar una vida prófugo, finge su propia muerte y se presenta como profesor de yoga, lo que da lugar a una broma al estilo de Bobby Sandals. También enseña a Naoise y a su mejor amigo, Liam Óg Ó Hannaidh, a hablar irlandés. “Cada palabra es una bala”, dice, y lo dice en serio.

Kneecap es, en esencia, una crítica al imperialismo británico y un homenaje a la identidad cultural irlandesa, destacando la importancia del idioma gaélico como símbolo de resistencia y de identidad nacional. Subraya la relevancia del lenguaje en la lucha por la libertad. Al hacer que los protagonistas rapeen en gaélico, Peppiatt resalta el poder del arte como herramienta de protesta.

Rich Peppiatt logra una dirección innovadora y enérgica que se adapta al espíritu del grupo Kneecap. El uso de edición rápida, sonidos dinámicos y la incorporación de los famosos murales de Belfast en la narrativa contribuyen a una experiencia visual que ayuda a comprender mejor los mensajes y reflexiones del filme, siendo un claro guiño a todas las luchas sociales que ha vivido la nación, y al mismo tiempo reivindica la cruda y caótica vida en Belfast hoy en día.

En resumen, Kneecap es una película radical y vibrante que combina con humor un mensaje político impactante, ofreciendo una perspectiva fresca y comprometida sobre la música y la protesta. Su mezcla de sátira mordaz, orgullo cultural y estilo visual innovador la convierte en una obra destacada dentro del cine contemporáneo irlandés.

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