La virgen roja narra la impactante historia de Hildegart Rodríguez, una joven prodigio y feminista en la España del siglo XX, cuya vida fue moldeada por el control obsesivo de su madre.
La virgen roja(2024)
Puntuación: ★★★★
Dirección: Paula Ortiz
Reparto: Najwa Nimri, Alba Planas, Aixa Villagrán y Patrick Criado
Disponible: Prime Video
Hay muchas historias ocultas en nuestra historia como humanidad. Pequeños eventos que están atrapados en grandes acontecimientos que definen el futuro y que son olvidados, ignorados o censurados. Pero eso no significa que no puedan resurgir para mostrar su importancia, en especial en las luchas sociales. Tal es el caso de esta historia de una figura española en la que la realidad supera la ficción, dándonos a conocer a una persona que desafió todos los estándares de la sociedad de su época.
La virgen roja trata sobre la vida de Hildegart Rodríguez Carballeira (Alba Planas), una joven superdotada que se convirtió en la abogada más joven de la historia de España a los 16 años. Fue también una escritora feminista que abordó la sexualidad en varios ensayos y luchó por los derechos de las trabajadoras. Sin embargo, nada de eso previó la tragedia que le aguardaba en 1933.
Dirigida por Paula Ortiz, esta obra histórica con tintes de thriller retrata la vida de una joven cuya crianza única prometía convertirla en la mujer del futuro, tal como quería su madre Aurora. No obstante, se enfrentó a una sociedad misógina de principios del siglo XX, que la dictadura española intentó borrar después.
La historia de Hildegart ya ha sido adaptada varias veces al cine, en libros y también en obras de teatro debido a todo lo que vivió esta extraordinaria mujer. Reconocida en el ambiente intelectual y político, se convirtió en blanco de críticas desde su concepción, marcada por el singular proyecto de su madre. Aurora, una mujer culta, llevó a cabo un experimento social con el objetivo de salvar al mundo.
La narrativa está relatada desde la perspectiva de su madre, lo que nos permite observar las vivencias de Hildegart desde cierta distancia y analizar cómo fue su vida. Resulta interesante desde varios ángulos, pero evidencia que Hildegart no pudo disfrutar de sus propios deseos y anhelos porque vivía para cumplir el plan de su madre. Aquí surge la enorme contradicción de Aurora.
En mi opinión, Aurora es el personaje más interesante, pues tiene la misión de liderar una revolución sexual y feminista para el bien común. No obstante, mantiene a su hija bajo control y restringida a sus propios intereses, volviéndose tan posesiva que disminuye la feminidad de Hildegart.
La película nos muestra los logros y avances de Hildegart hasta que aparece en su vida su primer amor, lo que provoca un conflicto mayor en la relación madre e hija. Esto saca a relucir lo peor de la figura de autoridad y genera el suspenso que conduce al clímax. Todo esto se enmarca en una época conflictiva y cambiante de la sociedad española, llena de resistencia a estos cambios.
La dirección destaca por el manejo de los movimientos de cámara y el montaje, logrando dinamismo en todo momento. A la vez, utiliza primeros planos que crean intimidad con los personajes y construcciones visuales estilizadas que hacen la película magnética. Esto se complementa con una fotografía increíble, que mezcla naturalidad con una iluminación estilizada para crear grandes momentos visuales.
Aunque la obra me fascinó en varios aspectos, siento que el ritmo rápido hace que muchos sucesos ocurran de inmediato, sin dar respiro para que los personajes secundarios puedan desarrollarse. Solo el interés romántico y la sirvienta tienen momentos para brillar, pero pequeños conflictos planteados son olvidados rápidamente. Además, los simbolismos evidentes utilizados por la directora no aportan tanto como se esperaría.
Esta es una historia más que interesante. Es fascinante descubrir estas pequeñas figuras históricas que contribuyeron a la construcción de una mejor sociedad. En una época en la que se adaptan muchos personajes históricos, conocer uno relativamente desconocido resulta un soplo de aire fresco entre tantas películas mediocres u olvidables.
Así, nos encontramos ante una historia increíble, con grandes actuaciones de Alba Planas y Najwa Nimri, que nos permiten empatizar con sus personajes. La dirección de Ortiz y la fotografía elevan el relato, dándonos al final una película sobresaliente que vale la pena ver para adentrarnos en este periodo de la historia española que merece ser más reivindicado en las luchas sociales.\