El nuevo filme de Léa Mysius trata de una niña que tiene un poderoso sentido del olfato que de repente le ayuda a viajar en el tiempo, para observar eventos que ocurrieron antes de que ella naciera.
Los Cinco Diblos (2022)
Puntuación: ★★★½
Dirección: Léa Mysius
Reparto: Adèle Exarchopoulos, Daphne Patakia, Sally Dramé, Swala Emati y Noée Abita
Disponible: MUBI
La cineasta Léa Mysius toma varios ingredientes interesantes y los mezcla para crear una extraña propuesta de psicodrama con tintes sobrenaturales, donde desea explorar los cambios vulnerables y emocionales de una niña alrededor de siete u ocho años, etapa donde los niños pueden ser particularmente más vulnerables al cambio, ya que es la entrada a la preadolescencia, situación que lleva a muchos niños más que otros a redescubrirse, reflexionar sobre cuestiones existenciales o luchan con la incipiente comprensión de que sus padres son falibles y mortales.
Lea Mysius, convierte esta difícil transición en una historia donde sigue a una niña birracial cuyo sentido del olfato es casi sobrenaturalmente agudo, mismo que le sirve para tener visiones de una época anterior a su nacimiento. Todo sostenido por dos actuaciones sobresalientes, de Adèle Exarchopoulos y la actriz infantil debutante Sally Dramé. Los Cinco Diablitos es un híbrido de género dramático finamente elaborado, cuya historia no termina en ser tan interesante como los temas que busca cuestionar.
La siempre excelente Adèle Exarchopoulos interpreta a Joanne; una joven madre que trabaja en el centro deportivo local y está infelizmente casada con Jimmy (Moustapha Mbengue), un chico de Senegal. Las tensiones en su matrimonio empeoran mucho cuando Jimmy revela que su hermana Julia (Swala Emati) viene para quedarse; una mujer perturbada cuya historia con ambos es inquietante. Y debajo de todo esto se encuentra la extraordinaria figura de su hija Vicky (Sally Dramé), de 10 años, que sufre bullying racista en la escuela y tiene un sentido del olfato superpoderoso: puede reconocer cualquier cosa por su olor.
La historia del filme se desarrolla en Isère, un lugar cerca de los Alpes franceses, zona hermosamente verde y fría que adquiere un tono casi sacado de un cuento de hadas, que por el momento el entorno natural parece algo extraño como si no fuera real.
Joanne (Exarchopoulos) descubre un día, que el sentido del olfato de Vicky es tan agudo que, con los ojos vendados, puede incluso detectar la mancha de café seco en la página de un viejo cuaderno. Lo que su madre no sabe, o está demasiado distraída por su propia vida estancada y su matrimonio como para preocuparse, es que, como una perfumista en ciernes, Vicky combina ingredientes para crear perfiles de olor de personas, lugares o cosas, mismos que los guarda en frascos en la habitación de huéspedes.
Todo se vuelve más inusual, cuando Vicky huele ciertas pociones que ha hecho, cae al suelo en trance y comienza a tener visiones de cosas que sucedieron antes de que ella naciera, no solo involucrando a sus padres, sino también a la hermana Julia de su padre (cantante Swala Emati, impresionante en su primer papel actoral), que ha aparecido de repente diez años después de dejar el pueblo en circunstancias un poco extrañas.
Pese a que la película inicie un poco lenta y como que no tenga un norte, a la mitad del metraje la mayoría de los espectadores ya habrán adivinado hacia dónde se dirige la melodramática historia de fondo descubierta por las visiones de Vicky, que esos momentos son utilizados para explicar a la vida de los personajes adultos.
En sí, Los Cinco Diablos (que es el nombre del centro deportivo local en la película) es un filme que va de una niña intensa, vulnerable, pero también un poco aterradora que convierte su inquietud por el matrimonio inestable de sus padres en un superpoder oscuro que no puede controlar, y que el guion tampoco intenta explicar, simplemente la cinta termina cayendo en un drama romántico de un amor no correspondido.