Paco León se mete en un armario para huir de su vida, pero lo que descubre son los secretos de una familia. Félix Viscarret traslada a la pantalla el alucinante universo de la novela de Juan José Millás Desde la sombra.
FCE2023 | No mires a los ojos (2022)
Puntuación: ★★★
Dirección: Félix Viscarret
Reparto: Paco León, Leonor Watling, Àlex Brendemühl, Juan Diego Botto, María Romanillos y Marcos Ruiz
Sin duda alguna uno de los actores más interesantes del cine moderno de España es Paco León, un actor que logra siempre sorprender para bien o para mal, pero nadie se puede quejar de que no se esfuerza para no quedarse en el molde, y es por eso que su filmografía destaca por afrontar retos como es Kiki, el amor se hace, Toc Toc o Rainbow, esto desde el punto cinematográfico, ya que también lo vemos en series como Arde Madrid o La Casa de las Flores; pero en No mires a los ojos de Félix Viscarret, León afronta otro reto más, incluso se mete en un armario y permanece bastante tiempo en él.
Basada en la novela Desde la sombra de Juan José Millás, Viscarret junto al coguionista David Muñoz logran llevar a la pantalla la obra, tratando de preservar la extrañeza, el humor y el surrealismo que tiene el material escrito, que sobra decir que dicha novela es lo bastante curiosa.
La historia de No mires a los ojos va de un hombre retraído y solitario (interpretado por un comedido e introvertido Paco León), este se esconde en un armario (luego de una fatídica noticia) del dormitorio de un matrimonio (Leonor Watling y Àlex Brendemühl), quienes son padres de una adolescente. Desde su escondite, el intruso espía a la aparentemente familia perfecta.
Decir más de la historia es arruinar la experiencia para las personas que no hayan leído el libro, pero el filme guarda varias sorpresas y giros inesperados, haciendo que el filme juega con varios géneros que transitan entre el suspenso, la comedia y la intriga, todo construido bajo las emociones del deseo y el duelo. Quien haya leído a Millás, tanto sus libros como sus columnas periodísticas, sabe que aporta auténtica magia al situar al lector en un universo paralelo, divertido e inquietante, para desentrañar la naturaleza humana y sus contradicciones.
Ese detalle que hace brillante a Millás, es lo que intenta Viscarret hacer aquí, y como sabemos no es lo mismo el lenguaje literario que el cinematográfico, y lo que funciona en uno no siempre funciona en el otro, y es ahí donde el filme pierde; esto debido a la parte donde se construye el mundo imaginativo del personaje de León no termina de aterrizar, ya que se siente como algo inconexo o tonto a la hora de llevarlo al mundo real de la historia, debido a que los caminos narrativos no son los mismos, además que se nota mucho que Viscarret toma varias referencias a la escritura y dirección de Charlie Kaufman, algo arriesgado que la película no sabe controlar especialmente al querer retratar los vaivenes de una mente neurótica, que es capaz de construir ideas según las necesidades, complejos y carencias del ser humano y es donde la trama juega una idea: ¿Sigue todavía en el armario o ya ha salido de él?