El famoso influencer Jordan Firstman le propone un proyecto de televisión al director chileno Sebastián Silva que lo inicia como un ligue y un retrato sobre el privilegio rápidamente se convierte en una historia de un crimen.
Rotting In The Sun (2023)
Puntuación: ★★★½
Dirección: Sebastián Silva
Reparto: Jordan Firstman, Catalina Saavedra, Sebastián Silva y Robert Keller
Disponible: MUBI
Sebastián Silva es un cineasta chileno que en la mayoría de sus películas busca explorar la idea de personajes un poco tóxicos, egocéntricos y con una tendencia hacia lo alucinante, esto se retrata muy bien en los filmes Magic Magic y en Crystal Fairy & The Magical Cactus, esto mismo ocurre con Rotting In The Sun, en la que interpreta una versión de sí mismo, donde a lo largo de casi dos horas, ofrece mucho sexo gay, consumo de drogas aparentemente no simulados, y sobre todo un golpe crítico y duro hacia la cultura de los “creadores de contenido” y a las personas que se creen influencers, todo construido en un filme que es casi un psicodrama que se convierte en una historia de un crimen deliberadamente caótico.
En sí, el filme es muy natural en la forma que expone a sus personajes y sus temas, en ningún momento oculta su actitud liberal y descarada, que con el paso del tiempo tiene todos los elementos para convertirse en una cinta de culto, esto queda muy en claro cuando Silva y el coguionista Pedro Peirano desde el primer momento que inicia la cinta atrapan y desafían al espectador. El título de la película es toda una muestra de intenciones; otro aspecto es la forma en que está rodada la cinta, que utiliza el trabajo de cámara en mano en constante movimiento a cargo del director de fotografía Gabriel Díaz, detalle que su fusiona con la música de Nascuy Linares, creando una atmósfera desconcertante y un montaje de constante cambios como si la historia estuviera contada por fragmentos de una historia mucho más grande.
La historia parte de un encuentro genuino y casual en la vida real entre el director y Jordan Firstman. Si bien Firstman puede no ser un nombre familiar, el comediante gay e influenciador social ha conseguido 800.000 seguidores en Instagram gracias a publicaciones, a menudo sin camisa y videos divertidos sobre su vida como persona gay. Aquí, el famoso encuentro ocurre en una playa nudista que es muy famoso por encuentros entre personas gays, donde Silva se ha retirado en un intento de deshacerse de un hastío de su vida que ni siquiera la ketamina puede superar y que lo ha llevado a buscar en Google ideas en “Como suicidarse sin dolor”.
La pareja se encuentra en un incidente en el que ambos casi se ahogan y Firstman inmediatamente se lanza contra el director, alegando una conexión espiritual, especialmente porque la noche anterior vio Crystal Fairy, Jordan es desagradable, agresivo y egocéntrico, pero no es un cabeza hueca, sus intentos de cortejar a Silva para que colabore con él son rápidos y completamente desprovistos de autoconciencia. Todo esto es irritante para Silva, quien ve la popularidad instantánea en línea del joven en marcado contraste con sus propias luchas creativas. Todo este acto del filme es divertido, ocurrente e incluso extravagante; Silva nos muestra muchos penes en cinco minutos, más de los que he visto en las pantallas de cine en una década de ver películas; su representación de la cultura gay hedonista se siente agradablemente informal y natural.
Entonces sucede algo terrible. Decir algo más arruinaría la absoluta sorpresa. La película toma un repentino cambio de rumbo después de que la acción regresa al apartamento de Silva en la Ciudad de México. Este giro de los acontecimientos es algo con la criada de Silva, Vero interpretada de una manera increíble Catalina Saavedra, su trabajo es de una roba escenas, especialmente en la forma que la mujer trata de ocultar su secreto que solo ella y nosotros conocemos. Su ansiedad impregna el resto de la película, que se vuelve oscuramente divertida.