Soi Cheang regresa triunfalmente al cine de género con un filme llenó de acción de la vieja escuela de los años 80 ambientada en la desaparecida Ciudad Amurallada de Kowloon.
Twilight of the Warriors: Walled In (2024)
Puntuación:★★★★
Dirección: Soi Cheang
Reparto: Raymond Lam, Louis Koo, Sammo Hung, Terrance Lau, Philip Ng, Tony Wu Tsz Tung y German Cheung
Disponible: Google VOD
Los fanáticos del cine de acción estamos en horas grandes con el estreno de la nueva obra épica del maestro Soi Cheang. Ambientada en la época dorada del género, la década de 1980, en el enclave de pandillas de la famosa y antigua ciudad amurallada de Kowloon de Hong Kong. La película es todo un deleite, ya que no solo sabe crear grandes escenas de acción, sino que aprovecha deliciosamente la ropa, los cortes de pelo y las gafas de sol de esa década para crear toda una experiencia.
El filme es toda una experiencia de adrenalina de dos horas que aprovecha al máximo el entorno: la ciudad amurallada de Kowloon, un bloque de apartamentos densamente poblado, ahora demolido, que formalmente era un enclave de China dentro de Hong Kong administrado por los británicos, pero que, en la práctica, actuaba fuera del alcance de las fuerzas del orden, los urbanistas, la red de servicios públicos y el saneamiento. Desde arriba, en tomas claramente enriquecidas con imágenes generadas por computadora, la ciudad amurallada de la película parece algo sacado de Blade Runner, un cadáver en descomposición de un lugar donde miles de personas viven literalmente unas encima de otras. Aquí lo que sorprende es que tal vez lo que vemos en pantalla no es ni de cerca el como fue realmente este lugar.
Raymond Lam es todo coraje y determinación en el papel de Lok, un inmigrante ilegal que después de enfrentarse al jefe de la tríada Mr. Big (la leyenda de las artes marciales Sammo Hung), se refugia en la Ciudad Amurallada. El enclave está gobernado por Cyclone (la veterana estrella de Hong Kong Louis Koo), el duro, pero benévolo padrino cuya banda tiene el poder. Lok comienza a encontrar trabajo en algunos de los numerosos talleres y restaurantes que aprovechan los alquileres gratuitos de esta densa madriguera y la falta de interferencia externa.
Mr. Big está desesperado por hacerse un hueco en el feudo de Cyclone, que está en crisis. La verdadera acción comienza cuando el mayor de los terratenientes, Chau (Richie Ren), descubre un secreto sobre el joven Lok que lo convierte en un enemigo. La decisión de Chau de pedirle a Mr. Big y a sus secuaces que entren y eliminen al joven luchador probablemente pareció una buena idea en ese momento, pero no se trata de personas sobre las que se tenga ningún control, especialmente sobre el teniente de Mr. Big, o especialmente por King, un psicópata risueño con poderes sobrenaturales de kung-fu interpretado con una alegría maníaca por Philip Ng, también está Shin, interpretado con una arrolladora seducción por Terrance Lau Chun-him como uno de los amigos leales de Lok.
Si bien el exterior de la Ciudad Amurallada está hecho digitalmente, su interior es un triunfo de la artesanía cinematográfica tradicional, un asentamiento que de alguna manera se ha fusionado en un único y enorme organismo con todo a la vista: cableado, desagües, canaletas, fragilidad humana, comida antes y después de haber sido ingerida. Cuando estallan peleas, estos hombres tienen la misma probabilidad de agarrar un sartén o un soplete que un cuchillo. Cuando caen, lo hacen por las grietas entre los edificios, sobre cobertizos de hierro corrugado, agarrándose desesperadamente a cables aéreos; cuando suben nuevamente las escaleras, una motocicleta funciona tan bien como un par de piernas. Todas estas secuencias de acción están tan nítidamente coreografiadas que no puedes quitar la vista a la pantalla, todo esto se eleva con una fotografía espectacular de Cheng Siu-Keung, que si la academia fuera más abierta estaríamos ante una seria contrincante a mejor fotografía.
Twilight of the Warriors es un filme a la vieja escuela, un drama criminal lleno de acción que habla sobre la solidaridad masculina, el egoísmo y la traición. Pero es a la vez una elegía y un triunfo del cine de género de Hong Kong.