‘Novocaine’ es una comedia negra y un tanto absurda que narra las desventuras de un típico perdedor que debido a un “golpe de suerte” se convierte en héroe de acción.
Novocaine: Sin Dolor (2025)
Puntuación: ★★★
Dirección: Dan Berk y Robert Olsen
Reparto: Jack Quaid, Amber Midthunder, Ray Nicholson, Betty Gabriel, Matt Walsh y Lou Beatty Jr.
Estreno en cines
La comedia negra ha demostrado ser una de las herramientas más efectivas del cine para abordar temáticas complejas sin perder su atractivo popular. Novocaine, dirigida por Dan Berk y Robert Olsen, se inscribe dentro de esta tradición al contar la historia de Nathan Caine (Jack Quaid), un hombre introvertido con un raro trastorno genético que lo hace inmune al dolor físico. Lo que en la vida cotidiana representa un inconveniente para Nathan, se convierte en una ventaja cuando se ve envuelto en un violento, sangriento y trágico asalto a la sucursal del banco donde trabaja, junto a Sherry (Amber Midthunder), una nueva y joven empleada de la sucursal que también guarda secretos y secuelas físicas de un pasado oscuro, ella es secuestrada por el grupo de ladrones. Nate, desesperado, sale en su búsqueda.
La premisa de Novocaine encuentra su fortaleza en la paradoja de su protagonista: un hombre que no siente dolor en un mundo donde la sensibilidad parece haberse atrofiado. La película aprovecha este concepto para desarrollar situaciones absurdas que, sin embargo, resuenan con una crítica más profunda a la falta de empatía en la sociedad contemporánea. Lo más interesante del guion, es que la película evita caer en la repetición gracias a la frescura de su tono y a la precisión de su humor físico, que recuerda a clásicos del slapstick pero con una ejecución más moderna y estilizada.
Berk y Olsen, conocidos por su capacidad para equilibrar géneros, consiguen en Novocaine un balance entre el thriller y la comedia, permitiendo que la acción avance sin perder el tono ligero. La construcción del personaje de Nathan es clave en esta ecuación, ya que su evolución de un ciudadano común a un héroe accidental se da de forma progresiva y orgánica. Jack Quaid ofrece una interpretación carismática, aportando matices de vulnerabilidad que contrastan con la supuesta indestructibilidad física de su personaje.

Más allá de sus lecturas sociológicas, Novocaine es, ante todo, una película de entretenimiento puro. Su ritmo ágil, la combinación de secuencias de acción con diálogos afilados y la química entre sus protagonistas la convierten en una experiencia cinematográfica ideal para el público general. El filme no pretende ser una meditación profunda sobre la condición humana, sino ofrecer un espectáculo divertido y bien ejecutado, lo que la hace perfecta para una salida al cine y comer palomitas.
En un panorama donde muchas comedias de acción se limitan a repetir fórmulas probadas, Novocaine se destaca por su originalidad conceptual y su ejecución dinámica. Aunque no reinventa el género, sí demuestra que una idea creativa, un guion sólido y un reparto comprometido pueden hacer la diferencia entre una película del montón y una experiencia realmente disfrutable.