‘Agente Stone’ es un filme que logra algunos momentos divertidos, pero palidece en comparación con algunas películas de su género.
Agente Stone (2023)
Puntuación: ★★½
Dirección: Tom Harper
Reparto: Gal Gadot, Jamie Dornan, Matthias Schweighöfer, Archie Madekwe, Alia Bhatt y Sophie Okonedo
Disponible: Netflix
La actriz Gal Gadot, conocida por el papel de Diana Prince en el universo extendido de DC, u otras películas como Muerte en el Nilo o Alerta Roja; ahora llega como protagonista de una película de la cual no se sabe a qué otros filmes intentan imitar, disimulando de manera intrépida; lo cual ni alguien que no haya visto Misión Imposible llega a encontrarle su gran similitud. La película intenta venderse con buenos efectos, con un soundtrack muy corriente que le da emoción a las escenas, y busca forzadamente meterse como una película para recordar.
Agente Stone se basa en el trabajo secreto de una agente quien trabaja para MI6, un grupo de agentes secretos, el cual busca la manera en que exista paz en el mundo. Sin embargo, la agente Stone también trabaja, aparte de su equipo MI6, para The Charter. Este equipo de agentes también busca hacer el bien, pero en su poder poseen una computadora, conocida como The Heart, inimaginablemente capaz de hacer lo que sea. Un grupo de “terroristas” quienes buscan hacer el bien también, aparentemente. Ellos van tras El Corazón, quieren tenerlo en su poder como venganza de tantos años bajo el dominio de corruptos y grandes empresas que les han quitado sus libertades; de ahí la razón por la que pareciera que buscan el bien, sin embargo, queda muy incompleta la historia.
El largometraje, como mencioné anteriormente, tiene buenos efectos, se disfruta, tiene escenas emocionantes las cuales van acompañadas de una banda sonora no muy notable, pero que le da ese toque para al menos ser una película entretenida. La película tiene un gran faltante y es la trama. De verdad que se centraron muchísimo en parecerse a otras películas de agentes secretos como M-I, no obstante, no le llega ni a los talones, y con la trama quedan aún más lejos de lograrlo. Al final, termina siendo una película más de acción, donde hay un grupo de agentes secreto que busca el bien y tienen como enemigos otro grupo el cual dedica su vida en conseguir algo sumamente poderoso y que nunca se sabe de donde consiguen tanta plata para, de verdad, conseguir todos los suplementos necesarios para conseguir su meta. Además, artefactos tecnológicos, que ni Tom Cruise se atrevió a tanto; están demasiado sacados de la manga.
Sin contar el final, ya pueden predecir qué sucede. Pero finalmente, la película brinda un mensaje haciendo saltar mi curiosidad, y es el tema de una inteligencia artificial capaz de lograr todo en el mundo. Muestra el posible peligro de que algo así pueda suceder, y la terrible circunstancia de que algo así pueda caer en las manos equivocadas, dándole el poder a algún grupo que podría muy bien acabar a toda la humanidad. La idea me parece muy volada en esta película, pero tampoco se aleja mucho de películas como Trascendence (2014) y Eagle Eye (2008).
Puede ser una película no muy original en muchos aspectos, y puede que la trama se aleje bastante de lo deseado por el público al forzar mucho el agradarle a este mismo. Pero, por otro lado, al final puede ser interesante el tema que toca, la manera en cómo se desarrolla el conflicto no está tan mal, aunque pudo ser mucho mejor, y menos predecible; sin embargo, mantiene al espectador entretenido. Para un público fan de películas de agentes secretos puede ser bastante de su agrado; y si se busca un filme bien hecho, quizá no sea lo que se busca.