Storm Reid la actriz de Euphoria se convierte en una detective más lista que el FBI en una continuación independiente de la cinta de Searching (2018), aunque está vez todo se vuelve más inverosímil y demasiado sentimental.
Desconectada (2023)
Puntuación: ★★★
Dirección: Nicholas D. Johnson y Will Merrick
Reparto: Storm Reid, Nia Long, Amy Landecker, Ken Leung, Thomas Barbusca, Lisa Yamada y Joaquim de Almeida
Disponible: Estreno en cines
A mediados de los años 2010, surgió una moda en la industria del cine, una que era mezclar los nuevos usos de la tecnología con películas thriller, entre esos filmes podemos citar Unfriended, Open Windows o The Den, un subgénero muy económico, que incluso reemplaza el uso de la cámara inestable, ya que dichas películas se basan completamente en la pantalla de una computadora portátil de alguien, una actualización de terror cibernético que se suponía que repercutirá en una audiencia cuyas vidas también hicieron lo mismo, pero que no terminó de funcionar como se pensaba.
Pero, en 2018 apareció un cinta que utilizó dicho recurso mucho mejor y con bastante ingenio, dicho filme era el debut de Aneesh Chaganty y la película se llamaba Searching. Lo que hacía Chaganty era utilizar los mismos recursos pero desde una manera más realista y el uso normal que hacemos los humanos con la tecnología que tenemos en casa, además que la trama no se centraba en demonios, si no era más detectivesca. En Searching, el filme sigue a un padre soltero, interpretado por John Cho, quien busca desesperadamente ayuda en línea para localizar a su hija desaparecida, dicho misterio se resolvió de una manera en que solemos resolver misterios menores nosotros mismos, con la ayuda de Internet.
La cinta de Chaganty fue un éxito merecido, pero cinco años después, nos llega un spin-off/secuela cuyo interés está por determinarse, ya que lo que fue innovador e interesante, está nueva entrega no carga ese factor, mucho menos el de sorpresa.
En Desconectada, la trama cuenta una historia similar: una relación tensa entre padre e hija, una desaparición desconcertante, todo se desarrolla en una MacBook, pero, como suele ser el caso con las secuelas, sube la apuesta considerablemente con tecnología más nueva, giros más grandes y una construcción que intenta ser más compleja. Hay que mencionar que los personajes nuevos no están relacionados con los del original, pero hay vínculos (el protagonista ve una serie de Netflix basada en lo que sucedió) y otros huevos de pascua para aquellos que invirtieron lo suficiente como para buscarlos.
Aparte como es una secuela, los guionistas buscan darle un nuevo aire, y aquí la dinámica también ha cambiado esta vez con la hija (Tormenta Reid de Euphoria) es la que busca a su padre, bueno en este caso madre (Nia Long), que se va de vacaciones con su novio y como adivinan no vuelve. El cambio de perspectiva significa que las bromas a expensas de las deficiencias tecnológicas de los padres ya no existen y todo eso se reemplaza con una chica que es prácticamente una hacker, y que puede descubrir todo un misterio más rápido que el FBI, claramente estamos conscientes que del 2018 al 2023 son como 50 en tecnología, pero en la forma que el personaje construye las bases del misterio en ocasiones se siente forzado o incluso muy conveniente para que la trama avance.
Al igual que la primera, la trama es envolvente y, a veces, genuinamente innovadora, ya que la película se basa en escenas de inteligencia extrema a menudo seguidas directamente por escenas de asombrosa estupidez para poder mantener ciertos desarrollos en secreto. Reid es una protagonista convincente y dominante y los directores solo quieren que veamos más de ella, pero eso a menudo significa que sigue saliendo en su cámara web o en su FaceTime solo para que nosotros, la audiencia, podamos verla reaccionar. Los momentos de incredulidad inverosímil y suspiro ante la pantalla también se encuentran con una sobredosis de sentimentalismo, algo que se sentía menos sombrío en el original, que era más elegante en la forma que un padre comienza a conocer a su hija realmente.
Otro punto en esta nueva entrega, es que el guión para hacer su secuela más grande crea mucho pero muchos giros en la trama, algunos predecibles desde que inicia la cinta y esos giros salvajes, llegan a no tener mucho sentido en la reflexión, pero produce conmoción en el camino, y al final solo nos queda una cinta entretenida.