Joe (Joaquin Phoenix), es un ex marine y antiguo veterano de guerra, un tipo solitario que dedica su tiempo a intentar salvar a mujeres que son explotadas sexualmente.
Nunca estarás a salvo (2017) es un thriller psicológico dirigido por Lynne Ramsay, protagonizado por Joaquin Phoenix como Joe, un veterano traumatizado que trabaja como ejecutor a sueldo. Su último trabajo consiste en rescatar a la hija de un senador de los traficantes sexuales, pero esta tarea rápidamente se sale de control y lo obliga a enfrentarse a sus propios demonios internos. La actuación de Phoenix es verdaderamente impresionante; aporta una intensidad y vulnerabilidad al papel que cautiva a los espectadores de principio a fin.
Phoenix siempre ha sido conocido por su compromiso con los roles, pero aquí va un paso más allá al encarnar a Joe con una emotividad tan cruda que no puedes evitar sentirte atraído por su historia. Transmite fuerza física y fragilidad emocional simultáneamente, desde escenas de lucha explosivas en las que despacha a múltiples agresores a la vez, hasta momentos de contemplación tranquila en los que se nos permite vislumbrar lo que hay debajo de la agitación superficial dentro de él, lo que nos hace sentir profundamente conectados con este personaje a lo largo de cada escena.
A lo largo de la cinta, vemos cómo el trauma ha afectado no solo las elecciones de vida de Joe, sino también cómo da forma a sus relaciones con quienes lo rodean; algo que Phoenix retrata magistralmente a través de sutiles matices en el lenguaje corporal y las expresiones faciales sin tener que recurrir nunca al diálogo melodramático o al histrionismo como podrían haber hecho algunos actores en su lugar. Está claro que tanto la escritora y directora Lynne Ramsay como el actor Joaquin Phoenix pensaron mucho en la elaboración de este complejo arco de personajes a lo largo del tiempo.
La trama de la película es simple pero efectiva, la narrativa no es lineal, con flashbacks y secuencias oníricas que se suman a la atmósfera surrealista e inquietante de la película. El ritmo es deliberado y lento, lo que permite a la audiencia sumergirse por completo en el mundo de Joe.
Los visuales de la película son igualmente impresionantes, con Ramsay y el director de fotografía Thomas Townend creando un mundo oscuro y atmosférico que es a la vez hermoso y aterrador. La partitura de Jonny Greenwood se suma al tono espeluznante e inquietante de la película, con melodías ominosas y sonidos discordantes que complementan perfectamente las imágenes.
En general, “Nunca estarás a salvo” es una película fantástica que muestra las increíbles habilidades de actuación de Joaquin Phoenix. Es un verdadero maestro de su oficio y esta actuación es una de las mejores. Si eres fanático de las actuaciones intensas y emotivas, definitivamente vale la pena ver esta película. Lastimosamente la misma no se encuentra disponible en ninguna plataforma de streaming.