El famoso guionista Charlie Kaufman adapta el libro de Emma Yarlett para crear su primera película familiar sobre un niño que le tiene miedo a la oscuridad.
Orión y la Oscuridad (2024)
Puntuación: ★★★★
Dirección: Sean Charmatz
Voces: Jacob Tremblay , Paul Walter Hauser , Werner Herzog, Chelsea Peretti, Rob Delaney y Angela Bassett
Disponible en Netflix el 02 de febrero
¿Alguna vez alguien pensó que el poco convencional guionista Charlie Kaufman, creador de Being John Malkovich o Synecdoche, New York se atreviera hacer una película familiar?, creo que la respuesta sería nadie, detalle que se ve como una grata sorpresa, debido a que sí se atrevió, y el resultado es todo un placer, ya que el resultado es brillante, aunque se nota en ciertos momentos que sus famosas crisis de neurosis adultas están reflejadas.
Para esta animación familiar de DreamWorks/Netflix, Kaufman ha adaptado un libro ilustrado de la autora británica Emma Yarlett, y Sean Charmatz hace su debut como director, después de haber trabajado como un ex artista del guión gráfico de películas como The SpongeBob SquarePants Movie y Trolls World Tour.
La historia trata de un niño un tanto infeliz llamado Orion, que tiene miedo de casi todo: levantar la mano en clase, ser acosado, hacer que el inodoro se desborde con una evacuación inmoderada, hablar con la chica que está secretamente enamorado, así muchas cosas más… Pero su miedo principal es la oscuridad. Pero una noche, la mismísima Oscuridad entra de mal humor en su dormitorio: una figura enorme, envuelta en una capa y con el rostro envuelto bajo una capucha oscura. Oscuridad insiste en llevar a Orion en un vuelo nocturno mágico a través de paisajes para demostrar que no es tan malo, y le presenta a cinco amigos de tipo abstracto como las emociones en Pixar, entre ellos Insomnia, encargado de mantener a la gente despierta con pequeños pensamientos insidiosos, Ruidos Inexplicables, haciendo lo mismo con golpes y golpes repentinos. Por otro lado está Silencio, Dulces Sueños y Dormir, que se encarga de ayudar a las personas a conciliar el sueño.
La cinta juega principales con su concepto del miedo y como nos enfrentamos a él, pero como eso no es suficiente para Kaufman, el guion también va a jugar con el tiempo, ya que también saltamos hacia adelante para ver que esta es una historia que el adulto Orion le está contando a su propia hija, Hypatia; por lo que estamos viendo una historia dentro de una historia, algo muy Kaufman, ya que ese detalle le agrega otra capa al filme, y es el del poder de las historias y como están evolucionan y se transmiten entre generaciones.
Orión y la Oscuridad es una obra dulce, un cuento infantil lleno de emociones que nunca aburre, aunque cae en ciertos lugares predecibles, eso no le resta encanto, especialmente por sus diversos niveles metaficcionales de narración, que hacen que el espectador adulto no se aburra, y a los niños no los tratan como tontos. La sorpresa más grande de esto, es que Kaufman también es cine para toda la familia.