Amanda Kramer crea un filme queer, camp, exagerado y musical con Andrea Riseborough y Harry Melling donde interpretan a una pareja extraña que habitan los bajos mundos de una ciudad genderqueer.
Please Baby Please (2022)
Puntuación: ★★★★
Dirección: Amanda Kramer
Reparto: Harry Melling, Andrea Riseborough, Demi Moore, Mary Lynn Rajskub y Karl Glusman
Disponible: MUBI
Con aires de cine de serie de B de los años 70, la cineasta Amanda Kramer construye un filme altamente camp y kitsch, siendo estos sus mejores adjetivos, a la hora de describir lo que vemos en pantalla donde los destinos e identidades sexuales se entrelazan entre una pareja con los de una pandilla de vagabundos.
La cinta inicia con la llegada de dicha pareja de recién casados a un barrio estilizado con colores de neón ubicado en el centro de Manhattan durante la década de 1950, donde ambos son testigos de un asesinato. La travesura kitsch de Kramer es una odisea genderqueer tan espeluznante como su uso de la paleta de colores donde abundan los azules eléctricos y los rosas vaginales calientes. Es una producción teatral desvergonzada, estridente, y como tal podría no ser del agrado de todos, ya que es todo un reto lograr conectar con lo que vemos en pantalla.
Pero cualquier película donde salga Demi Moore usando trajes exagerados abriéndose camino mientras habla sensualmente sobre un lavavajillas y que le permita a Andrea Riseborough ofrecer una actuación camp usando trajes imposibles, ya es una obligación de verse.
Riseborough interpreta a Suze, la inquieta esposa de Arthur (Harry Melling), quien atraviesa una especie de crisis de identidad de género. Después de presenciar un ataque brutal de los Young Gents, una banda de matones vestidos de cuero que parecen haber escapado de una producción de S&M de West Side Story, tanto Suze como Arthur se sienten incómodos. El corazón de Arthur da un vuelco cuando sus ojos se conectan con los de Teddy (Karl Glusman, más sensual que nunca), el líder de la banda, quién vive su sexualidad libremente.
Los cambios de personalidad de Arthur durante mucho tiempo han sido las quejas de su esposa, en especialmente por qué “se niega a ser un hombre” como dicta la sociedad, y toma la arrogante vida de los hombres pandilleros como ejemplo de su discurso, siendo ese el principal punto de crítica del filme de la directora Amanda Kramer; quien busca discutir lo que es la heteronormatividad y los estrictos cánones de las sociedades desde la mirada de la década de los 50, donde parecería imposible.
Además de los personajes mencionados, dentro de la trama vemos otros como la manada de amigos de Suze y Arthur y la fabulosamente glamurosa vecina del piso de arriba interpretada por Demi Moore, cuyo apartamento es un escaparate de electrodomésticos de alta gama y cuyo matrimonio está algo atestado por su tendencia a coleccionar amantes.
Please Baby Please, es una obra arriesgada e incluso descarada, especialmente como busca proyectar la sensualidad de los personajes a través de coreografías extravagantes (la película se desarrolla como un musical sin las canciones) y un vestuario fetichista adyacente, que juega con la difuminación de los límites de género y las preferencias sexuales. La masculinidad concluye la película, es en gran medida una actuación, una especie de armadura que oculta las ansiedades tácitas y el miedo de los hombres a expresar sus sentimientos.