Señora influencer es una intrigante y espeluznante fantasía que explora la subcultura influencer, el poder de las redes sociales y la discriminación que puede generar especialmente por la edad, todo sostenido por una arrolladora actuación de Mónica Huarte.
Señora Influencer (2023)
Puntuación: ★★★½
Dirección: Carlos Santos
Reparto: Mónica Huarte, Macarena Garcia Romero, Bárbara Lombardo, Sandra Burgos y Leonardo Daniel
**Vista en screening** Estreno en Prime Video 21 de febrero
A lo largo de los tiempos el cine ha buscado la forma de llevar a la gran pantalla historias que hablen de la sociedad de cada época, y es por eso que no es extraño ver que el cine actual busque abordar temas tan actuales como son las redes sociales, y en como están influyen o afectan a las personas; y entre todos los temas que se pueden hablar de ellas uno es el caso del auge de los “Influencer”, personas que en su gran mayoría son seres sin mucho talento que se vuelven virales o “influyentes” en la sociedad, por no hacer nada ganan millones, y la sociedad como zombies los siguen sin una razón aparente.
Así que bajo todo ese contexto es que llega una película muy actual y tiene mucho que decir, esa es Señora influencer de Carlos Santos, una cinta que por culpa de su mal marketing y publicidad no la pudimos ver en el marco del Festival Internacional de Cine de Morelia en su edición 21, ya que el tráiler y póster que nos vendieron parecía una de esas películas mexicanas malas del montón; pero vaya sorpresa nos llevamos ahora que la vimos en Prime Video; la película es una sátira dura, directa y cruda sobre los falsos influencers, al mismo tiempo que aborda temas como la enajenación mediática, el impacto en las redes y el cyberbullying, todo construido bajo una comedia bobalicona y complaciente, pero que en medio de su trama tenemos un plot twist por mucho bastante curioso y brillante; al mismo tiempo que el guion se divierte con el patetismo de los personajes y sus miserias que fluyen para construir un retrato sobre la podredumbre social en la que vivimos.
Señora influencer, es una cinta que no busca ser complaciente con el espectador. Es verdad que en un primer momento todo se construye con un humor casi básico y simple, sobre todo en el tono de los personajes; pero conforme la trama va tomando rumbo ese tono va cambiando a una comedia ácida, dolorosa, patética y crítica, especialmente al consumismo social del espectáculo, algo que la sociedad mexicana tiene mucho apegó, ya que en su forma de ser tienen un culto a la celebridad muy grande.
La historia gira en torno a una mujer llamada Fátima (Mónica Huarte), una mujer en sus cuarentas, y toda su vida ha vivido bajo expensas y el yugo ¿o cuidado?, de su padre, un director de cine arrogante y vanidoso que solo se importa él, y a su hija la ha tratado como una paria, un bicho raro. Pero por un altercado en un centro donde la mujer hace trabajo social su vida cambia; dicho evento la lleva a conseguir un celular y conoce a una psicóloga que le ayuda con un tratamiento cargado de clichés y frases de autoayuda huecas, pero que resuenan en la frágil salud emocional de Fátima; que dichas frases la llevan hacer videos ridículos en redes sociales, mismo que se vuelven virales y así se convierte en la influencer más famosa del momento.
El impacto del momento social de Fátima llama la atención de Sofi y Cami, un par de jóvenes influencers, que intentarán aprovecharse de la repentina popularidad de la mujer fingiendo ser sus amigas. En la misma medida que Fátima logra tener seguidores que la aman, también atraerá a haters.
El personaje de Fátima está construido con un grado de ingenuidad bastante curioso, ya que realmente nunca entendemos si ella entiende que hace el ridículo, o que simplemente no le importa, porque vive en sus 15 minutos de fama, misma que la llevará a conocer la cruda realidad de las redes sociales. Por un lado, vivirá la parte más fabulosa, que es de las personas la amen y reciba mucho dinero por hacer el tonto, pero también conocerá el lado oscuro de la “fama”, donde a las malas aprenderá que las personas pueden ser crueles, y que solo buscan burlarse de las personas que son diferentes.
Carlos Santos logra crear una cinta con vuelco narrativo bastante acertado sin perder el tono humorístico que carga toda la obra, ya que con ese giro busca hablar sobre las nuevas generaciones, que son vacías y que solo viven al servicio de sus redes sociales, y por ende tienen una vida llena de resentimientos y de soledad; y al mismo tiempo decirnos que la fama fugaz y la misma tiene sus consecuencias.
Pero nada de eso funcionará sin la actriz correcta, y es donde entra Mónica Huarte, quien brinda una actuación arrolladora. La actriz logra transmitir la frágil vulnerabilidad de Fátima, una mujer que no busca el amor ni una realización personal, simplemente se deja llevar por sus demonios y carencias, cosa que lo irá demostrando a lo largo de la trama.
En los puntos negativos que carga la cinta, es que hay personajes sin sentido que no aporta nada, como la amante del padre, un personaje que parece sacado de una telenovela mexicana; otro punto, es que no todos los actores están bien o al nivel de Huarte, como la actriz Macarena García Romero, por momentos se nota sobreactuada y que solo escupe sus líneas, así otros actores más.
Fuera de esos detalles, Señora influencer es una grata sorpresa que vale la pena verla ahora que llega a Prime Video.