Céline Sciamma crea una historia de fantasmas fascinante sobre una niña que conoce a su madre cuando era niña. Una conmovedora película sobre la memoria, la amistad y la familia.
Petite maman (2021)
Puntuación: ★★★★
Dirección: Céline Sciamma
Reparto: Joséphine Sanz, Gabrielle Sanz, Nina Meurisse, Stephane Varupenne y Margot Abascal
Disponible: VOD Google Play
Céline Sciamma regresa al cine luego de la monumental obra maestra llamada Retrato de una mujer en llamas, donde la pregunta que surgía era que iba hacer la directora luego de semejante película y sí, realmente iba mantener el nivel; pues ya tenemos todas las respuestas que nos hacíamos en nuestros pensamientos. Sciamma sabía muy bien lo que había hecho y es por esa razón que su nueva película es una obra mucho más pequeña, más imaginativa e incluso más calidad, que se defiende libremente y que al final se te queda con una sonrisa en la cara.
Sciamma crea una hermosa obra que es casi un cuento de hadas que habla sobre la memoria, el amor maternal y la unión familiar peros sentirse trillado o cursi. El filme es simple, elegante y muy conmovedor, donde las niñas protagonistas de la historia se roban nuestras miradas al escucharlas decir esos largos e interesantes diálogos, pero sin perder esa chispa infantil, cosa que es lo mejor de la película, siempre se siente esa inocencia de la niñez.
La niña Joséphine Sanz interpreta a Nelly, la hija de ocho años de Marion (Nina Meurisse). Esta última está sometida a un enorme estrés debido a que su madre acaba de morir en un hogar de ancianos a causa de unas complicaciones de un trastorno óseo hereditario, que la propia Marion tuvo que evitar con una operación dolorosa cuando tenía aproximadamente la edad de Nelly.
Después de la muerte de su madre, Marion y su esposo llevan a Nelly a visitar la casa de su difunta abuela. Para Marion es un viaje doloroso lleno de recuerdos alegres y tristes que la abruman, especialmente el de una choza que construyó en el bosque. El peso de la nostalgia le pesa tanto a Marion que decide marcharse y deja a la niña con su padre; para Nelly ya es algo normal con su madre o su padre al ser hija única, ella entiende lo que es estar sola o crecer sin una compañía constante.
Luego de la partida de su madre, la niña un día jugando en el bosque, se encuentra con lo que parece ser una cabaña a medio terminar en un claro. Una niña la saluda felizmente pidiendo ayuda para terminarla. La nueva niña es la misma imagen de Nelly (interpretada por Gabrielle Sanz, evidentemente la hermana gemela de Joséphine) y anuncia que su nombre es… Marion. Después de jugar juntos, regresan a la casa de esta última, cuando la conocemos nos percatamos que es la copia exacta de la madre de Nelly. Y allí Nelly conoce a la amable y retraída mamá de Marion, quien camina dolorosamente con un bastón.
Sciamma plantea una historia de misterio o mejor dicho casi de fantasmas sobre los recuerdos de los adultos y en como influyen en los niños, pero la directora lo hace en una forma casi de parábola donde las conversaciones de las niñas sobre el futuro y el pasado se sientan con tanta naturalidad que en ningún momento se sienta forzado o impuesto sobre el guion. Creando una obra bastante contenida en tono y ritmo, ya que la cinta siempre descansa en la interacción de las dos niñas.
Al final el filme se puede sentir como una reflexión sobre la soledad que siente Nelly al no convivir más tiempo con su madre y es por eso la escena final que nos coloca el filme; al pensar eso podemos deducir que la Marion de niña también viva con esa soledad; pero la principal conclusión que puedo encontrar desde mis pensamientos es que todo sucede por la ansiedad que siente Nelly por querer pasar más tiempo con su madre, razón por la cual el universo conspira para que este anhelo suceda.
La mano delicada de la directora se siente en todo momento, incluso en la forma en que hace que todo se sienta tan natural, sin ser forzado, siendo esa es la magia de Petite Maman. Es verdad que Sciamma no llega al nivel de su anterior trabajo, pero aquí vuelve a reafirmar que es una de las mejores director@s de estos tiempos y que su forma de contar historias es única.