El director fue Jonathan Demme, quien, tras la fallida producción de Swing Shift, se alejó de los estudios y decidió centrarse en otros proyectos. Fue contratado para filmar cuatro conciertos en diciembre de 1983, logrando una experiencia cinematográfica extraordinaria.
Es un concierto en vivo que muestra el despliegue artístico de Talking Heads, con la maestría en cámara de Demme. La película comienza presentando a cada miembro de la banda de forma única hasta completar la alineación, con una puesta en escena vibrante y emocionante.
Desde el principio hasta el final, cada canción está grabada de manera distinta, comenzando con un travelling en picado que termina en un plano completo del cantante David Byrne. Se emplea un montaje dinámico que varía los planos para dar fluidez a la presentación.
Los demás integrantes también juegan un papel destacado, interactuando entre ellos y con el público, captados por cámaras ubicadas tanto en el escenario como entre la audiencia. La filmación en días distintos permite captar diferentes reacciones entre la banda y el público, generando una energía contagiosa en todo el espectáculo.
La cámara en mano rodea a los músicos, con cuadros que van del plano general al primer plano. Junto a una iluminación expresiva, estas técnicas marcan y resaltan la puesta en escena. Aunque el mayor disfrute será para los fans de la banda, cualquiera puede salir maravillado, gracias a un diseño sonoro envolvente que transmite la emoción del momento, como en un concierto en vivo.
En resumen, es una película para fans de Talking Heads, del new wave de los 80, o para cualquier amante de la música en general. Logra capturar la energía cruda del momento a través de la lente cinematográfica, utilizando planos secuencia, seguimientos, ángulos variados y un montaje que sabe cuándo cortar para mostrarnos imágenes increíbles. Todo esto es posible gracias al nivel de producción del espectáculo y la dedicación de los artistas.
Stop Making Sense es una experiencia sin igual en cines, que emocionará a cualquiera que la vea, y una excelente oportunidad para sumergirse en una época y un estilo musical que han dejado huella en toda una generación.