Bill Skarsgård sigue demostrando que tiene un talento brutal para la acción, y al mismo tiempo nos deja en claro que puede cargar toda una película sobre sus hombros. Ojalá pudiera decirse lo mismo del guion.
Contra todos (2023)
Puntuación: ★★★
Dirección: Moritz Mohr
Reparto: Bill Skarsgård, Jessica Rothe, Michelle Dockery, Yayan Ruhian, Andrew Koji, Brett Gelman y Famke Janssen
Disponible: Estreno en cines
Bill Skarsgård, uno de los hermanos Skarsgård, sigue abriéndose camino en el mundo de la actuación, y a lo largo de estos años nos ha ido demostrando que es digno de llevar ese apellido, incluso se puede intuir que podría a llegar a ese el mejor de los hermanos Skarsgård, esto lo decimos viendo los retos que ha ido tomando en su corta carrera, ha interpretado a un extraño posiblemente peligroso en Barbarian, un vampiro en Hemlock Grove, o su famoso Pennywise el payaso bailarín inolvidablemente desagradable en IT, pero Bill sabe que no se puede encasillar, y es por eso ha tomado roles en series o cintas un poco más tiradas al drama como The Devil All the Time, Clark o en Nine Days. Sin embargo últimamente se la ha visto incursionar en el género de la acción con John Wick 4, o en Atomic Blonde, pero en esas cintas sus roles no eran tan pronunciados o con tanta destreza, sin embargo todo eso ha cambiado con la cinta Boy Kills World (Contra todos), aquí Bill demuestra que todavía está dispuesto a sorprendernos, y puede ser una auténtica estrella de acción.
Un Bill Skarsgård, con más músculos, interpreta a Boy, uno de esos tipos de “soy un instrumento diseñado para un solo propósito” que prosperan en el género de acción. El único propósito es tradicional: la venganza. En este caso se trata de Hilda Van Der Koy, (Famke Janssen); ella es la cabeza de una rica familia gobernante en un estado totalitario que somete a su población a un “sacrificio” anual, durante el cual se ejecuta a supuestos disidentes y traidores. Después de haber perdido a sus seres queridos en una de estas ejecuciones ordenadas por el estado, Boy ahora está dispuesto a exigir un ojo por ojo y, como sugiere el título de la película, cualquiera que se le presente como un obstáculo para dicha búsqueda será tratado como un objetivo legítimo.
Como era de esperar el guion de la cinta es simple e incluso vago en su desarrollo, los personajes no tienen personalidad, ni profundidad especialmente los que tiene que ver con la familia de Hilda. Algunos detalles interesantes de la trama quedan sin profundizar, como quienes fueron los traidores al gobierno, porque fue que se decretó ese sacrificio anual, que fue lo que ocurrió en el pasado para qué desatará este gobierno, y entre otros detalles más. Es claro que uno no espera grandes cosas para este tipo de cintas, pero lo mínimo que pide uno es que te den un poco más de contexto al desarrollo del argumento.
Sin dudas lo mejor de la cinta es ver a Skarsgård que se nota que ha disfrutado el papel; el personaje es sordomudo, por lo que su actuación se acerca un poco al trabajo que hacía Buster Keaton, aunque aquí escuchamos los pensamientos de Boy como una voz en off en todo momento, pero esa voz no es la de Skarsgård, y la cinta te lo explica mucho mejor, es un deleite ese recurso.
El debut de Moritz Mohr, es una cinta llena de energía, que mezcla el humor con la violencia muy al estilo de Deadpool, pero con una construcción de mundos al estilo de Los Juegos del Hambre, y las caracterizaciones de los personajes tienen un toque a un estilo de anime, pero toda esa mezcla de personalidades no logra destacar como el director quería, pero eso no afecta a que la cinta sea muy disfrutable, cargada de escenas de acción casi imposibles, grandes coreografías, y muchas pero muchas patadas con sangre.