Tenemos una nueva entrega de “La Masacre de Texas”, ahora una secuela directa del clásico del original de 1974 que es retorcido con bastante gore y muy pobre en todo su desarrollo.
La masacre de Texas (2022)
Puntuación: ★½
Dirección: David Blue Garcia
Reparto: Sarah Yarkin, Elsie Fisher, Jacob Latimore, Moe Dunford, Olwen Fouere y John West Jr
Disponible: Netflix
Bueno, tenemos nuevamente el regreso de Leatherface, el asesino en serie inspirado en Ed Gein que siempre está cortando a la mitad a jóvenes tontos e idiotas, podría no ser un gran regreso para los fanáticos de la franquicia (ha estado en al menos una película cada década desde los años 70, la última vez en 2017), pero tiene algo que podemos decir que este “reinicio” de la nueva franquicia tiene una visión un poco más moderna, muy mal ejecutado, pero lo tiene.
Siguiendo los mismos pasos de Michael Myers, quien volvió a la relevancia en 2018 después de que nos insistieran en ignorar las secuelas de Halloween, en su mayoría atroces y permitir una limpia, la serie de La Masacre Texas intenta utilizar ese recurso, que no termina de funcionar correctamente.
El filme inicia casi 50 años desde que Leatherface asesinó brutalmente a un grupo de adolescentes en los años 70, esto nos lo ponen con un repaso proporcionado por el narrador de OG John Laroquette en la escena inicial, servido con un recordatorio de que Sally sobrevivió a la masacre (ahora interpretada por la actriz de teatro Olwen Fouéré después de la muerte de Marilyn Burns en 2014), quien desde entonces ha estado tratando de localizar al asesino de sus amigos, como mencionamos utiliza el mismo argumento narrativo de Halloween.
Luego la cinta se centra en unos nuevos personajes, Melody y Dante, chicos (clichés del género) generación Z que viven en San Francisco y se dirigen al sur en busca de una oportunidad de negocios al comprar una “ciudad abandonada” en Harlow con la idea de subastar ese espacio comercial y convertirlo en un refugio hipster para aquellos aburridos de la vida de la gran ciudad, es un pésimo desarrollo lógico de guion los chicos compran al ciudad sin revisar que no tienen todas las escrituras de los locales, no saben en que condiciones está, ni tampoco saben nada de la zona, y aun así deciden ir para vender junto con los posibles compradores.
Melody viaja con su hermana, mientras que Dante con su novia, al llegar los cuatros se encuentran con que en la ciudad todavía vive una residente que se niega a ser expulsada de su casa, ella es una ex administradora de un orfanato que insiste en que todavía conserva la escritura de su propiedad y que no irá a ninguna parte. Es lógico que la señora tiene y la razón, adicionalmente ella vive con quien será nuestro nuevo Leatherface, y cuando la señora muere luego de un altercado, se desata el infierno.
Luego de eso, la cinta cae en todos los prototipos básicos de una cinta como está, nadie de los guionistas quiso pensar mucho y lo único que vemos es exactamente lo que uno desea ver en una película con un personaje como Leatherface: mucha sangre. Aquí nada tiene desarrollo ni sentido, la cinta ve a los veinteañeros invasores como irrespetuosamente irrespetuosos (que lo son), por lo cual el filme busca en todo momento en que animemos a Leatherface mientras los despacha en una variedad de formas repugnantes, pero cada muerte está respaldada por el conocimiento de que esto realmente no tenía por qué suceder.
La cinta cuenta con varias escenas brillantes como la del autobús, cuyo momento vale la pena ver este filme, es corta en duración lo cual es agradable, pero ese factor le pasa la factura en el desarrollo de los personajes y la trama que intenta contar.