David Kross juega al gato y al ratón que nunca evoluciona en las manos del director Thomas Sieben
Presas (2021)
Puntuación: ★★
Dirección: Thomas Sieben
Reparto: David Kross, Hanno Koffler, Maria Ehrich, Robert Finster, Yung Ngo y Klaus Steinbacher
Disponible: Netflix
Cincos hombres se internan en un bosque para celebrar la despedida de soltero de uno de ellos, pero su diversión se ve interrumpida cuando un peligro humano los ataca sin razón aparente (literalmente son atacados sin sentido), los cincos hombres son cazados por un francotirador mientras se internan en las profundidades la montaña.
Thomas Sieben crea una obra cargada de suspenso, rodada en una única locación con un reparto de siete actores, donde pondrá a prueba el valor de la supervivencia y el valor de la amistad, pero que la cinta nunca llega a tener una fuerza para atrapar al espectador.
El quinteto de jóvenes, dos de ellos hermanos, todos amigos desde hace tiempo, disfrutan todas las aventuras que pueden hacer en la montaña, hacen un recorrido en una canoa, trekking, comparten varios momentos donde los diálogos nos van poniendo como son estos hombres, que al final tampoco es que tenga mucho peso, salvo para saber como se irán adoptando a su supervivencia.
Por ahí también tenemos unos flashbacks que atraviesan la mente de Roman (David Kross), unos que ayudan a entender al personaje, pero hay otros que solo están de relleno o subrayan lo que ya sabemos con los diálogos.
Cuando los hombres están dispuestos a irse de su paseo son atacados a larga distancia por un francotirador y es ahí donde inicia la persecución, que en un momento se dan cuenta que es una mujer. Para ese punto ya hemos visto treinta minutos de metraje, y es donde Sieben coloca las piezas del filme, y solo queda saber como se irá resolviendo esto, y los motivos de la cazadora.
Déjame decirles que las respuestas no es lo que uno espera, y la conclusión se siente hueca, aparte que las decisiones de los personajes dan risa, nunca piensan coherentemente, mientras que las revelaciones de la trama se sienten sacadas de la manga, cosa que hace que la película quede un poco ridícula; eso sí, hay unos momentos donde Sieben logra crear una tensión, detalle que se aplaude, debido a que es el objetivó. Con respecto al elenco David Kross logra sostener la película, realmente sin él esto se hubiera sentido un circo peor de lo que ya es.