Tom Cruise regresa al cine con una de las películas evento del año. El filme sorprende con respecto a su primera entrega en los 80 entre ellos varios cambios de tono. Maverick merece ser vista en la pantalla más grande.
Top Gun: Maverick (2022)
Puntuación: ★★★★½
Dirección: Joseph Kosinski
Reparto: Tom Cruise, Miles Teller, Jennifer Connelly, Jon Hamm, Glen Powell, Ed Harris, Val Kilmer, Lewis Pullman y Charles Parnell
Disponible: Estreno en cines
La primera entrega de Top Gun en 1986 es un clásico que abordaba las ideas de la Guerra Fría anti-Strangelove, el piloto de combate de la Marina de los EE. UU., el teniente Pete “Maverick” Mitchell, es acusado de dejar que su ego y orgullo siempre lo domine, Maverick es interpretado por Tom Cruise, que la edad no le ha pasado todavía grandes facturas, lo cual cuando vemos está nueva entrega es evidente que todavía es solvente físicamente, por ejemplo en la escena inicial lo vemos haciendo pruebas de vuelo imprudentemente en la caza de lograr un Mach 10 en contra de las órdenes del oficial en tierra (interpretado por Ed H1arris), quien se ve obligado a reconocer que tiene “coraje”.
Cruise ha cambiado mucho su carrera en los años ya no hace esas grandes películas que buscaba ganar el Oscar, pero tampoco le interesa hacer cine mediocre, al parecer, solo quiere hacer una gran película a toda costa, incluso a menudo sacrificando su vida por la toma perfecta. Y lo hace aquí nuevamente. Cruise toma de nuevo al personaje de Pete “Maverick” Mitchell, a probar los límites de sí mismo, su profesión en cada situación en la que se encuentra. Cosa que pensamos que el propio actor lo está haciendo en la vida real.
“Top Gun: Maverick” es sobresaliente; en definitivo es la mejor palabra para describir el paquete completo de la cinta, es el éxito de taquilla que estamos deseando ver siempre, no las mediocres producciones de alto presupuesto que nos tienen actualmente (Marvel). La película tiene emociones viscerales, peligros masivos, victorias ganadas y reñidas, pero también un romance cautivador, drama abrasador, grandes apuestas emocionales, corazón, alma e incluso un poco patetismo. En algunos niveles, es asombroso lo bien que funciona como un éxito de taquilla. Sin embargo, es el viaje para llegar allí y cómo toda la humanidad está incrustada en el tejido de la tremenda acción lo que es profundamente impresionante.
Casi 40 años después de la primera película, que fue dirigida por Tony Scott, Maverick sigue siendo veloz, menos necesitado, más centrado y tranquilo, de hecho, pero todavía en forma gigantesca enamorado de volar.
La trama de “Top Gun: Maverick” es simple pero efectiva; es aquí donde sobre sale un buen desarrollo guion, puedes tener la historia más clásica del cine, pero si la sabes construir y aprovechar funciona sin perder brillo. El gobierno de EE. UU. ha descubierto un sitio ilegal de uranio en algún lugar del extranjero que pronto estará operativo. El trabajo es algo arriesgado, es una misión suicida, lo que tienen que hacer es destruir el sitio antes de que esté en funcionamiento, pero para lógralo deben entrar encubiertos y buscar mantenerse con vida, es tan imposible que incluso el piloto más atrevido. Maverick, a la altura de sus habituales insubordinaciones recibe un ultimátum: enseñar a una nueva generación de pilotos graduados a intentar el emprender dicho juego.
Sin embargo, los fantasmas del pasado están en todas partes. El vicealmirante “Cyclone” (Jon Hamm) lo detesta a él y su reputación en términos inequívocos, un viejo amor Penny Benjamin (Jennifer Connelly) es un asunto pendiente con el que lidiar y, sobre todo, uno de los pilotos en formación es Bradley “Rooster” (Miles Teller), el hijo del difunto mejor amigo de Maverick, Nick “Goose” Bradshaw (Anthony Edwards del primer “Top Gun”). Maverick cometió muchos errores y decisiones dudosas en el pasado, incluidas algunas que se cruzaron con Rooster, es donde inicia un camino dificil entre alumno e instructor.
Dirigida por excelencia por Joseph Kosinski (Oblivion), ‘Maverick’ es sin duda la mejor película del cineasta, creada con una precisión que te acelera el pulso, carga una energía electrizante que te mantiene al borde de tu asiento, todo acompañado con una fotografía que eleva cada plano y te deja sin respiración.
Todas las actuaciones son correctas, ninguna sobre sale, pero para todos es claro que la película es de Cruise, nadie le roba el foco, su trabajo es intenso, en cada momento plasma una emoción altísima de vida o muerte. En el reparto están Glen Powell, Monica Barbaro, Charles Parnell, Jay Ellis, Danny Ramírez y más.
La partitura potente de Hans Zimmer, Lorne Balfe y Harold Faltermeyer es exagerada, pero funciona para el material elevado que vemos en pantalla. Las canciones que suenan son parte de la trama más no tienen el calibre de la entrega del ochenta.
‘Maverick’ no es una película de estudio ni de autor, es una película de palomitas de maíz, pero se comprende a sí misma, aún se trata a sí misma con respeto y nunca insulta la inteligencia de su audiencia que es lo más importante que muchos filmes se les olvida ese detalle.