Dwayne Johnson protagoniza la aventura de acción “Black Adam”. La primera película que explora la historia de este antihéroe de DC que llega a la pantalla grande bajo la dirección de Jaume Collet-Serra.
En la antigua Kahndaq, los dioses regalan sus poderes omnipotentes al esclavo Teth Adam. Pero los usa para cobrar venganza y lo encarcelan. Ahora, casi 5,000 años después, lo liberan y, una vez más, ejerce su oscuro sentido de justicia en el mundo. Renegado a rendirse, Teth Adam debe enfrentar a un equipo de superhéroes contemporáneos conocidos como la Sociedad de la Justicia: Hawkman, Doctor Fate, Atom Smasher y Cyclone, quienes buscan regresarlo a su cárcel perpetua.
Johnson protagoniza el filme acompañado de Aldis Hodge (City on a Hill, Una noche en Miami…) como Hawkman; Noah Centineo (To All the Boys I’ve Loved Before) como Atom Smasher; Sarah Shahi (Sexo/Vida, Una pareja explosiva 3) como Adrianna; Marwan Kenzari (Asesinato en el Expreso de Oriente, Aladín) como Ishmael; Quintessa Swindell (Voyagers, Trinkets) como Cyclone; Mohammed Amer (“Mo,” “Ramy”); Bodhi Sabongui (A Million Little Things) como Amon, y Pierce Brosnan (las franquicias de James Bond y Mamma mia!) como Doctor Fate.
Puedes se el destructor de este mundo… o puedes ser su salvador
En “Black Adam”, el icono mundial Dwayne Johnson encabeza el elenco con el papel principal del antihéroe favorito de los fans del universo DC, y lleva por primera vez a la gran pantalla su convincente historia de origen.
Johnson, que también es productor de la película a través de su empresa Seven Bucks, ha interpretado roles de casi todos los géneros, y usar un supertraje siempre fue algo que consideró. Tanto él como sus compañeros productores —Beau Flynn y Hiram García y Dany García, de Seven Bucks— fueron aficionados a los cómics cuando eran niños.
“Black Adam apareció en mi radar cuando yo era muy joven”, cuenta Johnson. “Me encantaban los cómics y siempre fui un niño de DC. El personaje me atrajo porque era uno de los pocos superhéroes, supervillanos, antihéroes —como sea que quieras nombrarlo— que tenía la piel morena y se parecía a mí. Además, siempre fue un tipo rudo”, sonríe. Aunque el camino hacia la gran pantalla fue largo —más de diez años, de hecho— la conexión de Johnson con el personaje y su historia nunca disminuyó. “Black Adam forma parte de mi ADN y de mi alma desde hace muchos, muchos años”.
Flynn, quien ha trabajado con Johnson y el equipo de Seven Bucks en ocho proyectos anteriores y en numerosas películas de acción, vio en este proyecto una oportunidad para incursionar en otro género, pero también para explorarlo de una manera diferente, y señala: “Este proyecto es la verdadera historia de génesis de Black Adam; se le llega a conocer a lo largo de toda la película y se ve por qué es diferente a cualquier superhéroe que se haya visto antes. Vive en la oscuridad y no sigue las reglas; tiene poderes divinos y dice lo que piensa sin miedo. El público no sólo estará increíblemente entretenido con Black Adam, sino también se sentirá conmovido e inspirado por su historia”.
Al igual que Johnson, la afinidad de Hiram García por Black Adam no disminuyó con los años, ni tampoco su certeza de que Johnson era el actor ideal para representar al hombre de negro. “Black Adam es el proyecto que hace match perfecto con Dwayne y con Seven Bucks”, dice. “Esperamos mucho tiempo para entrar en el mundo de los superhéroes, pero honestamente el reto era tratar de encontrar un personaje con el fuego y el filo que se alineara con Dwayne y que, al mismo tiempo, nos permitiera hacer todas las cosas que queríamos hacer. Hay un montón de superhéroes grandiosos que se rigen por normas y valores muy tradicionales; quisimos encontrar una propiedad que saliera un poco de la norma y nos permitiera poner a prueba la moral de los superhéroes. Si Dwayne representará a un superhéroe, será a alguien extremadamente poderoso que luche por lo que es correcto, pero a su manera”.
Para los realizadores, el objetivo fue aprovechar la legítima credibilidad de Black Adam en los cómics y combinarla con emoción, un poco de humor negro y mucha acción cinematográfica. Para ellos, sólo había un director que podía captar todo esto de forma épica, y ya estaba al frente de una de sus películas.
El regreso de Black Adam —con una venganza y el ejercicio de su singular concepción de justicia— llama rápidamente la atención de Carter Hall, alias Hawkman (Aldis Hodge), quien inmediatamente llama a su amigo Kent Nelson, alias Doctor Fate (Pierce Brosnan); Al Rothstein/Atom Smasher, (Noah Centineo); y Maxine Hunkel/Cyclone, (Quintessa Swindell). El equipo —que reintegra la Sociedad de la Justicia— se activa rápidamente para contener la destrucción que el antihéroe por todo el mundo.
Black Adam despierta en la Kahndaq actual, que en su época fue un gran reino, pero que ahora es tan solo una sombra de aquel entonces. El que fuera un país rico y de gran prestigio, cuna de la magia antigua y epicentro del recurso más vital e inestimable de la región, el Eternium, pasa por un saqueo de su más preciado recurso. A la cabeza de esa extracción está Intergang, una organización malvada que extrae los últimos vestigios de Eternium y destruye así la oportunidad de un futuro próspero para los ciudadanos de Kahndaq.
Mientras Intergang se adentra en las montañas que rodean la capital, aquellos que luchan por su libertad intentan frustrar sus esfuerzos, liderados por Adrianna (Sarah Shahi); su hermano, Karim (Mo Amer); su amigo Ishmael (Marwan Kenzari); e incluso el joven hijo de Adrianna, Amon (Bodhi Sabongui). Es durante una peligrosa expedición cuando Adrianna conjura inadvertidamente a Black Adam. Una vez liberado, parece que no hay forma de detenerlo o, para los miembros de Intergang en el ataque, de sobrevivir a él.