My Salinger Year cuenta las memorias de Joanna Rakoff con una actuación potente de Sigourney Weaver
My Salinger Year (2020)
Puntuación:★★★½
Dirección: Philippe Falardeau
Reparto: Sigourney Weaver, Margaret Qualley, Douglas Booth, Colm Feore, Matt Holland y Théodore Pellerin,
Disponible: Estreno en Cines
Algo que he aprendido a lo largo de los años viendo cientos de películas, es que en ocasiones hay filmes que te tocan de alguna una manera en especial, tal vez sea por su historia, por las actuaciones o por el simple hecho que hay destellos que generan cierta emoción, y esas cintas las recuerda uno con afecto, y tengo que decir que My Salinger Year entra en esa lista.
My Salinger Year es una película encantadora y cautivadora, basada en las memorias de Joanna Rakoff sobre su breve tiempo trabajando en la venerable agencia literaria Madison Avenue que representó entre muchos al autor icónico JD Salinger.
Margaret Qualley interpreta a la encantadora soñadora Joanna alrededor de 1995 cuando deja la escuela de posgrado, a su novio, y se muda al este de la Gran Manzana para convertirse en una escritora, luego de haber logrado vender dos poemas al Paris Review.
Al mudarse a la costosa Nueva York, Joanna tiene que afrontar su realidad, lo cual la lleva aceptar un trabajo como asistente en una agencia de literatura, dirigida por la mirada intrigante pero amable de Margaret (Sigourney Weaver, tremenda actuación), entre las funciones de la joven secretaria, le toca leer varias cartas enviadas por fans del autor Salinger, responderlas en palabras del escritor, además de escribir unos dictados.
Claramente es obvio decir que Joanna tiene mayores aspiraciones y que la propia historia va a ir acomodando las piezas para que la chica pueda ir madurando y así encontrar su rumbo; esto lo marca el filme con las breves charlas que tiene con “Jerry” cuando llama a Margaret, o la forma en que el personaje empieza sentir empatía con las personas que envían las cartas.
El filme no es pretencioso, eso ayuda a que la historia se sienta amena sin perder fuerza, los hechos que van ocurriendo, van ayudando a que podamos conocer mejor a Joanna, pero también cómo impacta su jefa en la vida de esta, pero la cinta es consciente de que también tiene que darnos detalles sobre Margaret, por los cuales nos da momentos humanos de ella.
La principal razón por la que la cinta funciona es porque nos vende personajes creíbles y humanos, nos los colocan en situaciones que podamos conectar, sin caer en lo cliché; las actuaciones son comprometidas y empáticas, además que su director Philippe Falardeau juega con varios recursos cinematográficos que aportan a la historia.
La presencia de Weaver en la película ayuda que se eleve el material, su impecable actuación le aporta bastante al filme y nunca deja que su Margaret llegue un territorio odioso o que caiga en comparaciones con Miranda Priestly de El Diablo Viste a la Moda o más reciente a la Baronesa de Cruella.
My Salinger Year no es una película redonda, tiene sus problemas de ritmo y hay algunos momentos que se subrayan o no terminan en nada; pero es una obra comprometida, y da gusto encontrar filmes así en la cartelera.