Nitram | Review

El director Justin Kurzel se aleja totalmente de las típicas películas sobre estos temas de asesinatos al evitar representar la masacre de Port Arthur en sí, y deja que sea Caleb Landry Jones quien tome el peso con una actuación inquietante.

Nitram (2021)
Puntuación: ★★★★½
Dirección: Justin Kurzel
Reparto: Caleb Landry Jones, Essie Davis, Anthony LaPaglia, Judy Davis y Annabel Marshall-Roth
**Vista en screening**

El director australiano Justin Kurzel ha hecho su película más inquietante desde su debut (Snowtown en 2011). Al igual que esa película, Nitram se basa en un caso real de asesinatos y de disfunción familiar, a diferencia de sus otras obras de su filmografía, el cineasta se aleja de su estética visual y de su forma de dirigir para dejar que sean los actores Judy Davis, Essie Davis (arrolladora), Anthony LaPaglia y principalmente Caleb Landry Jones, el centro de la obra.

El filme de Kurzel habla sobre la masacre de Port Arthur en 1996, que fue perpetrada por un joven violentamente perturbado, Martin Bryant, este disparó y mató a 35 personas en un sitio turístico de Tasmania con un rifle semiautomático comprado legalmente; aparentemente se dice que se inspiró en la masacre de Dunblane en el Reino Unido un mes antes. Luego de dicho evento el gobierno australiano tomó medidas inmediatas para limitar las ventas de armamento. 

Lo que hace al filme, no es ver como ocurren los eventos de dicho evento, lo que hace Kurzel y el guionista Shaun Grant es indagar en las causas que llevaron al joven Bryant a cometer dichos sucesos, y es así como la cinta dramatiza el entorno familiar profundamente perturbado del hombre, especialmente en todos los giros que tuvieron en su vida que en ocasiones pareciera cosas irreales, pero al final es una realidad que sí ocurrió.

En Nitram vemos a Bryant de unos veinte años, aquí interpretado por Jones, este es un joven inquietante que está escalofriantemente fuera de control, su personalidad ya inestable empeora por el acoso implacable que sufrió en la escuela, especialmente por su desagradable apodo de “Nitram” (“Martin ” deletreado al revés), que hasta la fecha le sigue molestando dicho nombre.

El joven Nitram, desde niño fue agresivo y violento, lo que llevó a sus padres una vida difícil, compleja incluso fantasmal. haciendo que el padre de éste sea débil, patético y términos de disciplina es blando, lo que dejaba que la madre del chico fuera la mala del cuento, ya que tuvo que ser estricta, feroz, pero resignada a que su hijo no la quiera y que este no sea una persona “normal” en términos sociables.

La película nos va mostrando como es este hombre, sus delirios y sus locuras que en un inicio queda muy en claro que padece de problemas de personalidad, pero las ganas de intentar hacer algo mejor con su vida Martin se las ingenia por hacer un poco de dinero, y ese motivo la lleva a conocer a una persona que le cambia la vida: Helen Harvey (magníficamente interpretada por Essie Davis), una adinerada y solitaria mujer que le toma cariño, que de dicha relación le compra un carro, lo invita a vivir juntos, incluso llega a despertar molestias a la madre de este , aunque en giro en la historia (si ocurrió realmente) Martin se vuelve extremadamente rico.

Kurzel hace todo un estudio del personaje, llevándonos a conocer todos sus miedos, sus dolores, incluso sus inseguridades por lo cual el espectador logra entender al personaje y por qué termina haciendo los crímenes que hace. Lo que es todavía más interesante es la decisión de Kurzel en no querer mostrar los asesinatos, por un lado lo deja hasta el final (es comprensible dejar ese momento como el clímax), lo que es todavía más interesante es que decide dejar la cámara fuera de los lugares donde ocurre los hechos, detalle que tiene sentido debido a que no es la idea que quería trabajar el cineasta y así se aleja de las propuestas que hemos venido viendo en los últimos años como las dos versiones del caso de Utøya.

El filme termina de funcionar todavía mucho más por la inquietante y sorprendente actuación de su protagonista Caleb Landry Jones, quien con este trabajo marca un antes y un después en su carrera, y ojo, ya venía siendo más que interesante; es que sin dudas su personificación de un joven atormentado que busca en todo momento la aprobación de la sociedad es más que brillante, la forma en que construye la personalidad de este hombre juega un rol de horror pero al mismo tiempo provoca lastima.

Al final Nitram, es una cinta por mucho interesante por la forma en que aborda su tema pese hacer una historia tristemente real, con una actuación de Jones más que fascinante.

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