Jennifer Hudson hace todo lo posible por lograr que alguien llegue despierto al final de la película
Respect (2021)
Puntuación:★★½
Dirección: Liesl Tommy
Reparto: Jennifer Hudson, Leroy McClain, Forest Whitaker, Tate Donovan, Marlon Wayans, Audra McDonald y Mary J. Blige.
Disponible: VOD en Google Play
Que tenemos que hacer los espectadores para que alguien se anime y haga un biopic decente sobre algún genio musical, Bohemian Rhapsody era versión rosa sobre la vida de Freddie Mercury, mientras que a inicios del año nos llegó el copy paste de wikipedia llamado The United States vs. Billie Holiday, que le dio una nominación sacada de caja de cereal a Andra Day (nadie se acuerda de ella), así con todo esas referencias nos llega ahora el filme sobre la vida de la legendaria Aretha Franklin, filme que cae en todos y cada uno de los clichés de este rígido subgénero.
Jennifer Hudson es hermosa y está entregada como la reina del soul, la ganadora del Oscar se comporta tan bien como podría esperarse considerando el material que tiene en manos. Ella realmente hace lo que puede con lo que tiene, incluso es por Hudson que la cinta logra crear un carácter al personaje que su guion nunca le construye.
La cinta inicia (como es cliché en este tipo de películas) mostrándonos la infancia de la futura cantante Aretha (Skye Dakota Turner), aquí la vemos como tiene que estar dividiéndose entre la familia de su padre y su madre (cameo de Audra McDonald), entre todo eso vemos la relación que le imponen desde niña con la iglesia, y presenciamos un evento cruel, una violación que la película solo hace acto de referencia, debido que su guion lo pasa por alto y lo deja de manera superficial, así como la relación de Aretha con sus hijos, nunca en toda la cinta hay un momento de ella como madre.
Desde el inicio del filme conocemos al padre de Aretha, un hombre rígido que establece las normas a su familia de una manera autoritaria, que carga con bastantes matices y es interpretado brillantemente por el ganador del Oscar Forest Whitaker, de hecho este es el único personaje secundario que está desarrollado después del de Franklin, los demás son de relleno para crear algo, incluso de tenemos otro cameo de Mary J. Blige.
Hudson asume la pantalla cuando llega la adolescencia y es sometida a una mayor atención masculina no deseada por parte de una serie de alcohólicos y abusadores, su recurrencia y sus esfuerzos por romper este ciclo le dan a la película su punto de apoyo dramático, pero se repite tanto que cuando llega a la mitad del largometraje crees que ya hemos visto todo, y es cuando nos damos cuenta de que todavía le falta una hora más.
El guion de Tracey Scott Wilson nunca sabe como contar los esfuerzos que tuvo que soportar Aretha Franklin para llegar hacer la figura que logró ser en un mundo machista y cargado abusos por ser mujer, la obra lo deja tan superficial que da tanta pena.
Para alargar la agonía del sueño, el filme para rellenar nos coloca cada vez que puede a Jennifer Hudson cantando los temas que la reina del soul, escenas que son emocionantes no porque ayudan a darle profundidad al filme, sino porque es vibrante ver la entrega de la actriz hacía las canciones de Franklin, todo un homenaje bien logrado.
Por eso lo único que puedo lograr decir es que si Jennifer Hudson quiere rendir un homenaje a la gran reina del soul simplemente grabe un álbum de versiones, por lo cual puede sacar más dinero y mejores reconocimientos que este bodrio que lo único logra es bostezar de lo largo que es, cosa que no necesitaba serlo.